Deporte para veteranos

Si eres deportista y rondas los 50 años, es muy probable que tú mismo o las personas que te rodean te hayan dicho que ya no tienes edad para competir o que te busques otras aficiones más acordes con tu edad.

No debemos olvidar que no hay una mejor medicina que el deporte así que la práctica deportiva no sólo mejora nuestra salud general, sino que la alarga a lo largo de los años. Cada día podemos ver ejemplos de atletas que demuestran que en deportes de resistencia el rendimiento se puede mantener o incluso aumentar, dependiendo de nuestra trayectoria deportiva anterior. 

Las personas sólo envejecen cuando se acomodan y dejan que su entorno les dicte lo que tiene que pasar en sus vidas. El verdadero antídoto contra lo que dice nuestra fecha de nacimiento es salir a correr, montar en bici, nadar, bailar o realizar cualquier otra actividad física siempre que se pueda. 

Desde un punto de vista fisiológico, el rendimiento deportivo mejora de forma sustancial desde la adolescencia durante 10 años, hasta los 30 años en los que se alcanza el pico máximo de este rendimiento deportivo. A partir de ahí, se produce un declive muy lento al principio pero que se hace más evidente a partir de los 40. 

En este punto, entra en juego nuestro inconformismo aceptando la realidad paro tratando de poner todos los obstáculos posibles a este "declive" físico. En segundo lugar, deberemos adaptar nuestro entrenamiento a nuestra nueva realidad como deportistas. Adquiere especial importancia el entrenamiento invisible centrándonoslas en una buena calidad del descanso y en una alimentación lo más variada y equilibrada posible. 

Y nunca olvides que la calidad de tus hábitos es la que determinará la calidad de tu vida.